Ayer en una de esas derivas de horas en wikipedia, acabé parándome ante unos cuadros del pintor genovés, Giovanni Battista Paggi, poco conocido discípulo de Cambiaso, y del que no tenía noticia. No es un pintor muy celebrado. La ejecución de todo lo suyo parecía buena, la composición bastante bizarra, hay efectos especiales psicodélicos, uso generoso del color y de la sombra, minuciosidad y complicaciones propias de una mente enrevesada. Y también hay un poco de lujuria en uno de ellos. Grata sorpresa, comparto.