Madrid es mi ciudad
porque no he nacido en ella
porque mis muertos están
en un pueblo que solo sirve
para recordarme que vinimos de otra parte.
Madrid es el lugar donde he acabado,
no tiene un solo rincón
que pueda siluetearse en negro
para hacer una camiseta de aeropuerto
que un francés o un chino
puedan exhibir para que otros sepan
que aquí estuvieron.
De mis amigos sé lo suficiente,
qué les gusta consumir y dónde,
hasta qué hora me aguantarán
y qué juegos les divierten.
Alguna noche supe donde nacieron sus abuelos,
o a quien votaron hace cuatro años.
No sé siquiera si existe Madrid,
a pesar de que supuestamente vivo en ella,
Diana dice que es Chamberí,
Luis recuerda que fue Lavapiés,
Aravaca no debiera serlo, dice Emilio,
mi madre proclama que algo se mueve en Gabriel Lobo,
John jura que los mejicanos compraron Jorge Juan
y Miguel anuncia que será Usera.
Madrid no consigue ser nada nunca,
el Manzanares es un río sin agua,
la Almudena es una catedral sin siglos,
no hay muralla, no hay castillo,
Madrid sabe fingir,
que tienes tu historia.